A continuación presentamos el recuento histórico trascendental de la Histotecnología en Venezuela hasta nuestros días...
"Todos los estudiantes y profesionales afines a la Histotecnología, estamos en la obligación de saber de donde venimos, quienes somos ahora, y en definitiva, hacia donde vamos"
Daniel Abrams.
CAPITULO III
CAPITULO IV
En abril de 1982, Este grupo lucho y trabajó para el rescate y reorganización del gremio, Logros de mejorías de trabajo y remuneración. Lamentablemente, les fue difícil realizar el censo exigido por el Departamento de Remuneración y Clasificación del MSAS por falta de una respuesta masiva por parte de los agremiados y hubo problemas personales que obstaculizaron el trabajo de los Analistas de personal.
A partir de 1991 por iniciativa del Dr. Jorge García Tamayo y del Lic. Enrique Montenegro se introdujo el diseño curricular del curso de Técnico Superior en Histotecnología al Consejo de Facultad de Medicina el cual fue aprobado aunque no llegó a su culminación por numerosos obstáculos que llevaron al abandono del proyecto una década después.
En 1991, la gran demanda de histotecnólogos en el país, condujo a la dirección del IAP a elaborar un programa de curso de Histotecnología, el cual fue presentado ante el Consejo de la Facultad de Medicina y aprobado. Con este programa se iniciaron el 28 de febrero ,7 bachilleres entre los cuales tenemos conocimiento de: Belinda de Albarrán, Rosalinda Pérez, Gisela Romero, Marcos López y José Pérez. Para el dictado de las clases teóricas, participaron la mayoría de los profesores del IAP: Dres: García Tamayo, Claudia de Suárez, José David Mota, el Licenciado Enrique Montenegro (HT formado en el Vargas), Norma Ayala, José Ángel Suárez, la HT Saudy Escorihuela y otros. Posteriormente, el programa se extendió hasta tres años con la finalidad de concederle una estructura curricular necesaria para optar al Título de Técnico Superior. El trámite duró tres años. En 1994, se presentó ante la Escuela de Salud Pública el diseño curricular y se hizo una preselección sobre 50 bachilleres de los cuales, 12 bachilleres iniciaron un programa de 3 años presentado ante la Escuela de Salud Pública. De este grupo se graduaron 9 estudiantes en 1997, aunque sin reconocimiento de la
Escuela de Salud Pública. Ellos fueron: Ana Eva Poleo, Ayarit Villaroel Peniza, Yoice Santiago, Wilman Suárez, Julio Galíndez, Ana Rita Zurba, Gaudy Calderón, Kenny Cépeda y Juan Pacheco.
Todos ellos culminaron el programa de tres años y presentaron una tesis de grado. Paralelamente, se estaban haciendo gestiones para la reclasificación del personal técnico en el Ministerio de Sanidad y Asistencia Social. En febrero del 1994, la Directora General Sectorial de Recursos Humanos solicitó a la Dra. Claudia de Suárez su colaboración para una entrevista con ella relacionada con la solicitud de estudio de Clasificación de la Serie de técnicos Histólogos. Reunión que nunca llegó a concretarse. ( Nº.Oficio 010 Borges Pino J.12 de febrero .1994.). La tercera promoción de técnicos entre 1998 y 2001 estuvo integrada por: Elsa Escalona, Nélida Díaz, Marelbis Urdaneta, Carmen Matos, Beatriz Huizi y Thony Fernández. La última y cuarta promoción de técnicos que finalizó en el año 2005, constó de solo cuatro técnicos: María Martínez, Rusmary Suárez, Dicson Rodríguez y Félix Rojas.Ya que fue suspendida, la formacion de técnicos en la UCV y en el pais.
En ese sentido, el decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la UC, profesor Antonio Eblén, sostuvo que aunque el Consejo Nacional de Universidades (CNU) no ha enviado los recursos para costear los gastos de estas nuevas oportunidades de estudio, "la universidad está sacrificando todo lo necesario a fin de sacar adelante estas carreras, con la esperanza de que en los próximos meses tanto la Oficina de Planificación del Sector Universitario (Opsu) como el Ministerio de Educación Superior nos honren con el presupuesto"
Mundialmente, la técnica histológica comenzó con el inicio de la histología y anatomía patológica a fines del siglo XIX y principios del siglo XX cuando llegó a su apogeo la llamada “Era de la histología del micrótomo o Era del micrótomo” iniciada por el alemán Mayer quien implementó la palabra histología en 1819. La introducción de la técnica de inclusión de los tejidos en parafina (E Klebs, 1864) y celoidina (P Schiefferdecker), así como la invención del primer micrótomo moderno (W His ,1866), instrumento de precisión para obtener cortes muy finos de tejidos y órganos en series ininterrumpidas, fue la que permitió el desarrollo de la anatomía microscópica hasta nuestros días. Igualmente se desarrollo el empleo de colorantes tisulares que permitían una mejor observación de los tejidos. (Gerlach utilizó el carmín, 1865; F. Bohmer, la hematoxilina en 1873; Golgi el método cromoargéntico, 1877; Busch, la tinción doble con hematoxilina y eosina, 1880 y P. Erlich, la safranina y el azul de metileno, 1887) De esta forma, conforme avanzaba el tiempo, se fueron acentando y acentuándo además todos y cada uno de los elementos necesarios para realizar la técnica histológica que ya para 1860 y 1890 se habian desarrollado multiples facetas de la misma.
Posteriormente...
Posteriormente...
Dr. José Gregorio Hernández |
Como podemos observar en la línea de tiempo superior, esquematizada en el dibujo, en esta etapa; el Dr. José Gregorio Hernández, se encontraba en Europa preparandose a principios de 1889 exactamente para lo que fuere hoy en día considerado como el primer técnico histólogo de Venezuela preparado en Francia por el Dr. Matías Duval quien por medio de un informe señalo:
"El Dr. Hernández ha trabajado asiduamente en mi laboratorio y aprendió en el, la técnica histología y embriología...me considero feliz al declarar que sus aptitudes, sus gustos y sus conocimientos prácticos en estas materias hacen de el, el técnico que me enorgullezco de haber formado. (Firmado
Matías Duval).”
CAPITULO II
Hospital Vargas |
Al inicio de esta línea de tiempo, es de notarse como José Gregorio Hernández a su regreso a Venezuela, este investigador trae consigo, los cuatro primeros microscopios modernos de 420, 865, 1250 y 1500 diámetros (microscopios fabricados por Zeiss que tenían una serie de lentes según los planos de Abbé, lo que permitía, resolver las estructuras hasta los límites teóricos de la luz visible)
El equipo que trajo el Dr. José Gregorio Hernández para el ejercicio de la técnica histológica era muy completo y extenso. Lo más importante fue que trajo, tres microtomos de marcas: Reichert, Cambridge, y Ranvier, cámaras de contaje hematológico, reactivos y numerosos colorantes. El Dr. Hernández dejó escrita su obra acerca de la técnica de las preparaciones microscópicas describiendo todos los pasos de la técnica: (colocación en las láminas, fijación, cortes con el microtomo y coloración.). Detalló los métodos, soluciones y procedimientos de las coloraciones simples y triples. Hernández tuvo el gran mérito de enseñar la técnica de coloración que Dimitri Leonidowitsch Romanowsky recomendó para teñir los parásitos maláricos en ese mismo año.
A parte de ello, desarrolla la técnica histológica al implantarse la histología normal y patológica en la Facultad de Medicina en 1891, con la instalación en el edificio de la Universidad Central, del Laboratorio de Fisiología Experimental y Bacteriología. Esto tras la publicación del artículo 1 del Decreto del Presidente, Doctor Raimundo Andueza Palacios, se creaban los estudios de Histología normal y Patológica, Fisiología Experimental y Bacteriología a cargo del Dr. José Gregorio Hernández, “conforme a los últimos descubrimientos hechos en las naciones más adelantadas”, iniciándose de esta manera, la etapa de Transformación Científica de la medicina venezolana.
Hernández, enseñaba el mismo a sus alumnos la técnica histológica y ellos a su vez, los más destacados (preparadores) siguieron la línea de su maestro y trasmitieron sus conocimientos aún después de su trágica muerte.
Hernández, enseñaba el mismo a sus alumnos la técnica histológica y ellos a su vez, los más destacados (preparadores) siguieron la línea de su maestro y trasmitieron sus conocimientos aún después de su trágica muerte.
Dr. Jesús Rafael Rísquez. |
Después de la muerte del Dr. Hernández en el año 1919, lo sustituyó su sobrino Inocencio Carvallo quien había sido su alumno en dichas materias. Por otra parte, cuando regresa a Venezuela, el primer anatomopatólogo graduado en el exterior, el Dr. Felipe Guevara Rojas; Inocencio Cavallo es sustituido, y la muerte prematura de Guevara Rojas conllevó al Dr. Jesús Rafael Rísquez a encargarse de la anatomía patológica en la Facultad de Medicina secundado por Aníbal Santos Domínici, Jesús María Romero Sierra y otros, quienes publicaron trabajos anatomopatológicos los cuales por su contenido necesariamente requirieron de técnica histológica. El Dr. Jesús Rísquez, alumno destacado de Hernández, Desarrolló ampliamente la técnica histológica y algunos de sus discípulos como el Dr. Sanabria, recordaba como él les mostraba un gran estante donde tenía archivada la gran colección de láminas histopatológicas por él elaboradas, durante su dedicación a la anatomía patológica.
Por otra parte el Dr. José Antonio O'Daly, alumno y sucesor de Rísquez; inició el estudio de la técnica histológica en forma sistemática en el Servicio del Laboratorio de Anatomía Patológica del Hospital Vargas, desde 1931. El hecho de que O'Daly fuese un muy buen técnico histólogo, nos permite inferir que también sus maestros conocían este arte aprendido del Dr. Hernández. Por esta
razón, opinamos que el Dr. O'Daly no fue en realidad un autodidacta, sino que recibió plenamente, las enseñanzas de Hernández a través del Dr. Rísquez.
Jose Antonio O'Daly enseñado por Jesús Rísquez, alumno de Hernández, inicia también en la técnica histológica, al grupo de los anatomopatólogos que habrían de ser la plataforma de la Anatomía Patológica moderna y contemporánea en nuestro país :Leandro Potenza, Alberto Angulo Ortega, Armando Domínguez Capdevielle, Darío Lozano, Rubén Calderón, Luís Manuel Carbonell Parra, Blas Bruni Celli, María Rivas Roz, y Jack Castro.
CAPITULO III
En 1949 sei naugura el Instituto Anatomo Patologico e inicia la catedra de Anatomía Patológica. Los integrantes del postgrado de Anatomía Patologíca desarrollado en el I.A.P aprendieron la técnica histológica del propio O'Daly, en 1959 y 1966.
Para esa época, ya aparecen los primeros histotecnólogos no médicos pero sin formación formal. Aunque en los documentos oficiales se les llamaba Técnicos histólogos, en la realidad eran nombrados en los manuales de cargos como Auxiliares de Laboratorio o de Investigación I o II, laboratoristas etc. De tal manera que hasta nuestros días, aún no ha sido aprobada legalmente la Carrera Universitaria de esta disciplina en Caracas, a pesar de varios intentos de parte de algunas instituciones universitarias privadas y oficiales de la región capital.
Podemos asegurar que para las décadas del 60-80, el IAP, se constituyó en un centro de aprendizaje de la técnica histológica aunque no reconocido oficialmente. Pudimos recoger en los documentos oficiales de la correspondencia del IAP, algunos nombres de quienes en sus laboratorios hicieron pasantías y se formaron como técnicos: Ligia Parra de Alfaro ( Ad-Honorem ,1964), Janne Utiger de
Brisbaine, (Ad honorem,1964), César Augusto Albornoz Jiménez( 1965 en la Sección de Patología Cardiovascular), Fredy Ramírez F ,1966 en la Sección de Patología Cardiovascular), Rafael José Zarate (1969), Idania Montaño Colombani (Ad Honorem desde enero hasta diciembre de 1970), Rosa Evelia Marchan ( julio - noviembre de 1970), Elvia Galvis( 9 de octubre a 12 de febrero de 1971), Carmen Quijada( 26 de septiembre a 12 de febrero de 1971) y Ramón Medina Páez( desde noviembre a febrero de 1971) y Reinaldo García Bracho quien estaba postulado para el cargo de técnico histólogo en el Hospital de Calabozo, Edo Guárico 1980).
En los dos primeros postgrados de Anatomía Patológica oficiales realizados en el Instituto Anatomopatológico, la práctica de técnica histológica fue impuesta por su director, el propio O'Daly quien impartió el mismo, todas las clases teóricas y prácticas. Los 18 patólogos de estas dos primeras promociones tuvieron que procesar, cortar y teñir sus propias autopsias por falta de personal técnico.
A partir de 1958, las secciones de Neuropatología, y de Patología Cardiovascular del IAP, el Laboratorio general y de la Cátedra de Anatomía Patológica, fueron centros de formación de varios Técnicos Histólogos.
En el laboratorio de Neuropatología, iniciaron su carrera de técnicos: María Antonieta Mendoza de Robles (Laboratorista Auxiliar I, 01-05-1964) y Gisela Clemente Vargas de Amundaray (Auxiliar de Investigación I, 01-11-1967), La HT Gisela Amundaray había comenzado sus estudios en técnica histológica con la conocida e importante Sra. Halina Hryncewicz de Kolodziej (tecnica histologa alemana). De ella aprendió la difícil técnica de las impregnaciones argénticas como el Bodian. Por esta razon el laboratorio de Neuropatología del IAP, fue un centro de aprendizaje importante para los HT quienes aprendieron de esa maestra, una técnica impecable, orden y disciplina que son los atributos más preciados en este oficio.
En 1964, cuando ya había concluido el primer postgrado de Anatomía patológica en el Instituto anatomopatológico” Dr.José Antonio O'Daly” (IAP), el Comité Técnico de la Escuela de Salud Pública decidió declarar en emergencia la situación de la Anatomía Patológica del país, comisionándose al Jefe del Departamento de Enfermedades Crónicas para dar comienzo a nuevos cursos y aprovechar los patólogos existentes.
El Comité determinó que a partir de 1966, las promociones de patólogos serían anuales. También se sugirió dotar de personal auxiliar suficiente a los servicios de Anatomía Patológica de algunos hospitales. Según el informe, en tres meses se consideraba que se aprendía la técnica de autopsias, los citotécnicos se formarían con cursos de 8 meses de duración y los técnicos histológicos con una preparación no mayor de 6 meses. Estos planteamientos fueron propuestos a la Sociedad Venezolana de Anatomía Patológica en marzo de 1965, solicitando un apoyo de todos los anatomopatólogos del país. De estos planes, solo resultaron los cursos de patólogos y citotécnicos, pero no se implementaron los cursos de técnicos histólogos a nivel nacional.
Podemos asegurar que para las décadas del 60-80, el IAP, se constituyó en un centro de aprendizaje de la técnica histológica aunque no reconocido oficialmente. Pudimos recoger en los documentos oficiales de la correspondencia del IAP, algunos nombres de quienes en sus laboratorios hicieron pasantías y se formaron como técnicos: Ligia Parra de Alfaro ( Ad-Honorem ,1964), Janne Utiger de
Brisbaine, (Ad honorem,1964), César Augusto Albornoz Jiménez( 1965 en la Sección de Patología Cardiovascular), Fredy Ramírez F ,1966 en la Sección de Patología Cardiovascular), Rafael José Zarate (1969), Idania Montaño Colombani (Ad Honorem desde enero hasta diciembre de 1970), Rosa Evelia Marchan ( julio - noviembre de 1970), Elvia Galvis( 9 de octubre a 12 de febrero de 1971), Carmen Quijada( 26 de septiembre a 12 de febrero de 1971) y Ramón Medina Páez( desde noviembre a febrero de 1971) y Reinaldo García Bracho quien estaba postulado para el cargo de técnico histólogo en el Hospital de Calabozo, Edo Guárico 1980).
En los dos primeros postgrados de Anatomía Patológica oficiales realizados en el Instituto Anatomopatológico, la práctica de técnica histológica fue impuesta por su director, el propio O'Daly quien impartió el mismo, todas las clases teóricas y prácticas. Los 18 patólogos de estas dos primeras promociones tuvieron que procesar, cortar y teñir sus propias autopsias por falta de personal técnico.
A partir de 1958, las secciones de Neuropatología, y de Patología Cardiovascular del IAP, el Laboratorio general y de la Cátedra de Anatomía Patológica, fueron centros de formación de varios Técnicos Histólogos.
En el laboratorio de Neuropatología, iniciaron su carrera de técnicos: María Antonieta Mendoza de Robles (Laboratorista Auxiliar I, 01-05-1964) y Gisela Clemente Vargas de Amundaray (Auxiliar de Investigación I, 01-11-1967), La HT Gisela Amundaray había comenzado sus estudios en técnica histológica con la conocida e importante Sra. Halina Hryncewicz de Kolodziej (tecnica histologa alemana). De ella aprendió la difícil técnica de las impregnaciones argénticas como el Bodian. Por esta razon el laboratorio de Neuropatología del IAP, fue un centro de aprendizaje importante para los HT quienes aprendieron de esa maestra, una técnica impecable, orden y disciplina que son los atributos más preciados en este oficio.
En 1964, cuando ya había concluido el primer postgrado de Anatomía patológica en el Instituto anatomopatológico” Dr.José Antonio O'Daly” (IAP), el Comité Técnico de la Escuela de Salud Pública decidió declarar en emergencia la situación de la Anatomía Patológica del país, comisionándose al Jefe del Departamento de Enfermedades Crónicas para dar comienzo a nuevos cursos y aprovechar los patólogos existentes.
El Comité determinó que a partir de 1966, las promociones de patólogos serían anuales. También se sugirió dotar de personal auxiliar suficiente a los servicios de Anatomía Patológica de algunos hospitales. Según el informe, en tres meses se consideraba que se aprendía la técnica de autopsias, los citotécnicos se formarían con cursos de 8 meses de duración y los técnicos histológicos con una preparación no mayor de 6 meses. Estos planteamientos fueron propuestos a la Sociedad Venezolana de Anatomía Patológica en marzo de 1965, solicitando un apoyo de todos los anatomopatólogos del país. De estos planes, solo resultaron los cursos de patólogos y citotécnicos, pero no se implementaron los cursos de técnicos histólogos a nivel nacional.
CAPITULO IV
El primer intento de formalizar estos estudios surgió en el Hospital Vargas con las iniciativas del Técnico Histólogo Arcani Bruzual formado en ese hospital. De tal manera que en diciembre del año 1967, se graduaron siete bachilleres como técnicos histólogos y luego llegaron a graduarse 12 a 14 bachilleres cada dos años. En 1980, el profesor Bruzual, se jubiló y hubo continuidad en la formación de Hts. Se calcula que se dieron 39 promociones. Estos cursos tenían tres objetivos principales: Procesar tejidos provenientes de autopsia y biopsias por los métodos de rutina, técnicas especiales y estudios básicos de Química, Histología Fisiología y Patología y Recopilación bibliográfica e interpretación de trabajos. El programa era dictado completamente en el Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Vargas de Caracas con la cooperación de la Unidad de Micología y Bacteriología de Servicio de Patología Clínica. Al terminar el Programa y su aprobación, recibían un Certificado con el Título de Técnicos histólogos. Para aspirar a dicho curso se requería ser Bachiller en Ciencias o su equivalente. El curso tenía una duración de 12 meses y comenzaba cada mes de febrero. El Programa tenía objetivos bien definidos para cada trimestre y contemplaba un plan de 2 años. Tuvimos acceso a algunos nombres de los graduados: Marilín Cubillán de la promoción del 1972, Adriana Smitter, Ilse Pujol, Lourdes Perdomo, Carmen Cortés, Antonio Díaz, Jonny Suárez (actualmente anatomopatólogo), Emilio Suniaga, actual presidente del Colegio de Histotecnólogos y Enrique Montenegro Yánez de la Promoción del 1974.
Entre tanto en 1968, un grupo de histotecnólogos con la HT Arminda Cedeño, Arcani Bruzual, Luís Arias y otros, consolidaron La Asociación Histotecnólogos de Venezuela (Coche vereda 70 Nº 12, Caracas). Los HTs agrupados, siguieron luchando por legalizar académicamente y gremialmente su profesión y realizaron varios cursos de actualización inclusive con profesores extranjeros de renombre como personal técnico del Instituto de las Fuerzas Armadas de EUA (Sr. Lee Luna). A pesar de estos esfuerzos, la carrera no tuvo reconocimiento universitario como carrera técnica. En un documento señalaron la denominación de la clases (histotecnólogo o técnico histólogo), las características del trabajo, las tareas típicas, (coloraciones de rutina y especiales), proceso de inclusión y orientación del material, requisitos mínimos exigidos, conocimientos, habilidades y destrezas, técnicas y certificados. Igualmente solicitaron al Ministro de Sanidad y Asistencia Social reconocer esta profesión con el fin de evitar la confusión de nombramientos que se venía confrontando y que conllevaba a diferencias en las remuneraciones y de otros beneficios. Esta petición se hacía dada la oportunidad de que por vez primera asumía este Ministerio un anatomopatólogo, el Dr. Blas Bruni Celli.( Carta de HT Luís Arias y Dra. Claudia BB de Suárez, Presidente y Asesora permanente de la Asociación de Técnicos Histólogos de Venezuela, al Ministro de Sanidad, Dr. Blas Bruni Celli, 14 .01.1975).
En 1972, en el Instituto Anatomopatológico (IAP) de la Universidad Central de Venezuela (UCV), bajo la dirección del Dr. Alberto Rivero y la coordinación de la Dra. Claudia de Suárez, se realizó el primer curso teórico de un año para los técnicos de experiencia, graduándose 10 técnicos del IAP y otros que provenían de varias dependencias universitarias como: de la Facultad de Odontología, del
Instituto de Higiene y de la División de Enfermedades Cardiovascular del Ministerio de Sanidad y Asistencia Social, con emisión del diploma correspondiente.
Para marzo de 1973, gracias a las numerosas diligencias de la representante de los empleados, Vestalia Da Silva y de otros funcionarios de las oficinas rectorales, asesorados por la Dra Claudia de Suárez, la clase Técnico Histólogo, fue introducida y todos los técnicos fueron clasificados con esta denominación como consta en el Manual descriptivo de clases de cargos. (Código 72.179 m Grado 5. Oficina de personal. Rectorado UCV, 1973), dejando atrás una cantidad de denominaciones dispares y no acordes con la profesión que ejercían como era: la de Auxiliar Tec investigación, Tec Investigación, Aux de laboratorio I, II y III, Laboratorista Asistente, Asistente de LAB, y en tres grados, según su experiencia (años de servicio).
En marzo de 1982 se realizó el II Curso de ampliación de conocimientos para histotecnólogos en el IAP, auspiciado por la Asociación de Histotecnólogos de Venezuela bajo la coordinación del HT. Luna procedente del Instituto de las Fuerzas Armadas (Washington, USA). Para este curso se redactó un folleto multigrafiado de 200 páginas. En 1983, se realizó el primer curso de inmunohistoquìmica en el IAP dirigido por el Dr. Jorge García Tamayo bajo la coordinación del Dr. Julio Martínez, profesor de Neuropatología y Jefe de la Sección de esta Especialidad en el Hospital Presbiteriano de la Universidad de Pittsburg (USA) y la Jefatura de la Sección de Neuropatología del IAP (Jesús González A), con la participación de la HT Saudy Escorihuela de García y del Dr. Arturo Rosas-Uribe. Igualmente se elaboró un folleto de más de 54 páginas editado por el IAP donde se exponían los principios de la inmunohistoquímica. Los autores consideraron que con este curso, se inició la inmunocitoquímica en esta institución.
En marzo de 1982 se realizó el II Curso de ampliación de conocimientos para histotecnólogos en el IAP, auspiciado por la Asociación de Histotecnólogos de Venezuela bajo la coordinación del HT. Luna procedente del Instituto de las Fuerzas Armadas (Washington, USA). Para este curso se redactó un folleto multigrafiado de 200 páginas. En 1983, se realizó el primer curso de inmunohistoquìmica en el IAP dirigido por el Dr. Jorge García Tamayo bajo la coordinación del Dr. Julio Martínez, profesor de Neuropatología y Jefe de la Sección de esta Especialidad en el Hospital Presbiteriano de la Universidad de Pittsburg (USA) y la Jefatura de la Sección de Neuropatología del IAP (Jesús González A), con la participación de la HT Saudy Escorihuela de García y del Dr. Arturo Rosas-Uribe. Igualmente se elaboró un folleto de más de 54 páginas editado por el IAP donde se exponían los principios de la inmunohistoquímica. Los autores consideraron que con este curso, se inició la inmunocitoquímica en esta institución.
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A partir de 1991 por iniciativa del Dr. Jorge García Tamayo y del Lic. Enrique Montenegro se introdujo el diseño curricular del curso de Técnico Superior en Histotecnología al Consejo de Facultad de Medicina el cual fue aprobado aunque no llegó a su culminación por numerosos obstáculos que llevaron al abandono del proyecto una década después.
Dr. Jorge García Tamayo
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En 1991, la gran demanda de histotecnólogos en el país, condujo a la dirección del IAP a elaborar un programa de curso de Histotecnología, el cual fue presentado ante el Consejo de la Facultad de Medicina y aprobado. Con este programa se iniciaron el 28 de febrero ,7 bachilleres entre los cuales tenemos conocimiento de: Belinda de Albarrán, Rosalinda Pérez, Gisela Romero, Marcos López y José Pérez. Para el dictado de las clases teóricas, participaron la mayoría de los profesores del IAP: Dres: García Tamayo, Claudia de Suárez, José David Mota, el Licenciado Enrique Montenegro (HT formado en el Vargas), Norma Ayala, José Ángel Suárez, la HT Saudy Escorihuela y otros. Posteriormente, el programa se extendió hasta tres años con la finalidad de concederle una estructura curricular necesaria para optar al Título de Técnico Superior. El trámite duró tres años. En 1994, se presentó ante la Escuela de Salud Pública el diseño curricular y se hizo una preselección sobre 50 bachilleres de los cuales, 12 bachilleres iniciaron un programa de 3 años presentado ante la Escuela de Salud Pública. De este grupo se graduaron 9 estudiantes en 1997, aunque sin reconocimiento de la
Escuela de Salud Pública. Ellos fueron: Ana Eva Poleo, Ayarit Villaroel Peniza, Yoice Santiago, Wilman Suárez, Julio Galíndez, Ana Rita Zurba, Gaudy Calderón, Kenny Cépeda y Juan Pacheco.
Todos ellos culminaron el programa de tres años y presentaron una tesis de grado. Paralelamente, se estaban haciendo gestiones para la reclasificación del personal técnico en el Ministerio de Sanidad y Asistencia Social. En febrero del 1994, la Directora General Sectorial de Recursos Humanos solicitó a la Dra. Claudia de Suárez su colaboración para una entrevista con ella relacionada con la solicitud de estudio de Clasificación de la Serie de técnicos Histólogos. Reunión que nunca llegó a concretarse. ( Nº.Oficio 010 Borges Pino J.12 de febrero .1994.). La tercera promoción de técnicos entre 1998 y 2001 estuvo integrada por: Elsa Escalona, Nélida Díaz, Marelbis Urdaneta, Carmen Matos, Beatriz Huizi y Thony Fernández. La última y cuarta promoción de técnicos que finalizó en el año 2005, constó de solo cuatro técnicos: María Martínez, Rusmary Suárez, Dicson Rodríguez y Félix Rojas.Ya que fue suspendida, la formacion de técnicos en la UCV y en el pais.
Después de tantos años, se han hecho varios intentos para la legalización de la formación de Técnicos Superiores en Histotecnología, en la región capital, los cuales no han prosperado aún, y hasta la fecha, todavia hoy en día no ha sido creada una Escuela oficial en la región capital, debido quizá a causa de la desidia, mala fortuna, o a los excesivos procesos burocráticos que acompañan a esta propuesta, cuya institución ha debido ejecutarse en nuestro país desde hace más de 40 años. Desde esa época, siempre ha existido una escasez de profesionales de esta disciplina, sumado a los múltiples obstáculos que ha tenido su profesionalización definitiva tanto en estas como en otras instituciones del país y en especial en la capital. Estos problemas se acentúan con el incremento de los requerimientos para el procesamiento de autopsias y biopsias los cuales han aumentado progresivamente con el tiempo en los centros oficiales y privados. A pesar de que esta tendencia ha seguido incrementándose en los últimos años, la Carrera de Técnico Superior en Histotecnología en la Universidad Central de Venezuela aún no ha sido aprobada, a pesar de que en su institución se ha capacitado el mayor número de técnicos histólogos en Venezuela desde hace más de 50 años
Sin embargo ante la carencia de una formación acreditada y tras tantos tropiezos que ha tenido la presente profesión, la Universidad Arturo Michelena decide, iniciar la carrera de Licenciatura en Histotecnología, por lo que presentó, ante las instancias competentes en el año 2005 el proyecto de creación de la misma. Como a continuación se describe en el siguiente documento emitido por parte del Consejo Nacional de Universidades.
DOCUMENTO |
El 29 de Abril del 2006 se publica un artículo en el periódico notitarde; donde el rector de la universidad "Arturo Michelena", ingeniero Giovanni Nani, anuncia la apertura de dos nuevas carreras de impacto social a partir del presente año lectivo, donde por primera vez se cursarán en el pais las profesiones de citotecnología e histotecnología. Indicó Nani que estos profesionales seran la mano derecha de los medicos anatomopatólogos, especialistas en el diagnostico mediante el examen de tejidos y secreciones, fundamentalmente para enfermedades como el cancer.
"En Venezuela hay un déficit de profesionales en esta área; por ello, estas dos nuevas carreras son de vital importancia, ya que al existir un mayor número de profesionales será posible realizar mas pesquisas de cáncer, enfermedad que ocupa las primeras causas de muerte en el país". Los jóvenes egresados en estas especialidades, laborarán en los Laboratorios de Anatomía Patológica públicos y privados y en las instituciones de salud donde se realicen pesquisas de la enfermedad y diagnóstico anatomopatológico. En ese sentido, hasta el 15 de junio próximo se realizarán las preinscripciones para estas carreras, ya que el incio de actividades será el 7 de agosto del año 2006.
La Universidad Arturo Michelena (UAM) es la única que actualmente se encuentra vigente formando el recurso humano requerido por el país para contribuir y elevar la calidad de vida y el bienestar colectivo de la población venezolana y por otra parte está formando un equipo en el área de la salud contribuyendo con el conocimiento en el diagnóstico clínico y ayudando a solventar la alta demanda de profesionales en la Región Centro-OCcidental del país para no depender exclusivamente de la región capital para estos tipos de estudios.
Posteriormente por si fuera poco 3 años después en el año 2009, se une a la formación de Histotecnólogos Venezolanos, la Universidad de Carabobo.
Fuentes: UCV, IAP
Edición y redacción de contenido: Lcdo. Daniel Abrams
REFLEXIÓN
Esta evolución histórica que se vino gestando desde hace mas de 130 años iniciada por el grande y recordado José Gregorio Hernández y por todos y cada uno de los personajes involucrados que han estado enmarcados a lo largo de la historia hasta nuestros días, han provocado una transformación extraordinaria por la que hoy debemos estar sumamente ¡AGRADECIDOS!
Por que es gracias al empeño de todos lo que formaron parte de esta hermosa historia por llevar la Histotecnología en Venezuela a otro nivel, que hoy en día existimos como gremio, apegados bajo el marco de la ley, clasificados como tiene que ser, para esta sociedad que tanto nos necesita.
Por esta razón, hacer de la historia un recuerdo presente en el tiempo, nos impide olvidar quienes somos, por que luchamos y hacia donde vamos.
Reflexión escrita por: Lcdo. Daniel Abrams.
Gracias por la información.
ResponderEliminarGracias a ti por confiar en nosotros como fuente de información janelly. ¡Un gran abrazo!
EliminarExcelente reseña histórica! Me siento muy conmovido,a leer este articulo, soy egresado del Instituto de Anatomía Patológica del Hospital Vargas de Caracas, egresado en el año 1988.
ResponderEliminarEjercí la profesión hasta el año 2003 ininterrumpidamente.
Guardo bonitos recuerdos de esta experiencia, me sentía comprometido con la carrera, era apasionado la técnica histológica. Hice microscopia electronica en la facultad de ciencias de la UCV, en fin me desarrolle en ese campo mientras pude.
Es una lástima saber que todavía se lucha por un reconocimiento a nivel superio.
Sin embargo me alegra que la UC este formando a nuevos histotecnologos con reconocimiento universitario.
Un placer, saludarles y a la orden en lo que pueda colaborar
Un abrazo a todos los colegas que mantienen esta pagina y felicitaciones por ese trabajo
Antonio Díaz. 0416-809-83-10 ; antonisan@gmail.com
¡Agradecido por su opinión Sr. Díaz!, nos da gusto saber que ha sido parte de esta bonita historia. Seguiremos trabajando en aras de enaltecer siempre a todos y cada uno de los profesionales que conforman esta maravillosa carrera, y en consecuencia a la carrera en si misma. Gracias por tomarse el tiempo de leernos.
EliminarP.D: La Universidad de Carabobo (UC), está formando nuevos Histotecnólogos con el grado académico de TSU, y la Universidad Arturo Michelena (UAM), con el grado académicos de Lcdo.
¡Un gran Abrazo!
El trabajo es muy bueno pero falta de ética. No menciona que la mayor parte fue redactada por la Dr.a Claudia Blandenier de Suarez en sus trabajos publicados.
ResponderEliminarHola, gusto en saludarle. Nos gustaría saber su nombre, para poder saber quién nos hace el comentario. Quisieramos aclarar que nuestro espacio es un blog de información y divulgación, en cuyo caso nos basamos en diversas fuentes para a modo de review o monografía, elaborar una opinión en torno a los datos encontrados. En ese sentido, en lo que concierne a este artículo, quien le escribe, Daniel Abrams, he colocado los organismos fuentes de los cuales he tomado los distintos extractos: Universidad Central de Venezuela - Instituto Anatomopatológico Jose Antono O'Daly debido a la multiplicidad de autores. Entidades que quienes han contribuido a escribir la historia representaban. La edición, organización de los extractos y redacción de contenido de opinión en torno a esos extractos para que tenga sentido cronológico ha sido elaborada por nosotros. Con lo cual no veo porque estaría falto de ética el desarrollo del mismo. Lamentamos que así lo haya sentido. Pero no ha sido nuestra intención. Al contrario, enaltecer nuestra carrera a través de los distintos personajes que la han escrito, ha sido nuestro cometido.
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